sábado, 28 de enero de 2017

No nos desensibilice


Que el conocimiento que se vaya adquiriendo no nos desensibilice, sino terminaríamos como terminaron en un momento los extraterrestres.
Ahí está el ejemplo de Jesús el cayó con la cruz no tanto por el dolor físico que tenía sino por el sufrimiento que le generaba la falta de toma de conciencia que lo rodeaba.
También Jesús lloró: en la tumba de Lázaro, ÉL lloró sobre la ciudad de Jerusalén, Jesús lloró en el Huerto de Getsemaní…, pero se quedó llorando y nada más, no, accionó 
Una cosa es como sentimos y otra como accionamos frente a ese sentimiento
Frente al dolor ajeno vamos a sentirlo en carne propia, eso es tener compasión sentir en carne propia el dolor ajeno y obrar en consecuencia.
Si fuéramos insensibles al dolor ajeno, terminaríamos siendo muy mentales estancándonos en nuestro proceso evolutivo.
Pero ojo… si sufrimos ¿bajamos los brazos? … o reaccionamos con más fuerzas para seguir andando y dar lo mejor de nosotros mismos al todo y a todos.
No bajemos los brazos.