viernes, 16 de noviembre de 2018

La mitad blanca y la mitad negra



Me imagino la vida como si fuera una carretera la mitad blanca y la otra mitad negra. En donde vamos recibiendo conocimiento, pero todo lo que recibimos lo podemos usar en forma adecuada o no.
Podemos basar todo el conocimiento sobre el amor, respeto, humildad, usarlo para ayudar a los demás, para unir, construir, para tratarnos todos por igual, el resaltar las virtudes de las personas y olvidarnos de sus defectos. Esta mitad de la carretera se basa en la felicidad. Por esta mitad va la conciencia crística y todos los seres de luz.
La mitad negra esta basada en el odio, la disociación, la vanidad, se basa esta mitad en los celos, la competencia, la comparación, el no tratar a todos por igual.
En esta mitad están los ¿Por qué? de la mente que matan el amor que fluye de nuestros corazones hacia las personas: ¿Por qué esta persona no hace esto?, ¿Por qué es así? etc.
Y los por qué de la mente que matan el amor que fluye de nuestros corazones por la vida:¿Por qué me pasó esto? ¿Por qué no fue de otra manera.
En esta mitad está el desanimo, la tristeza, el darnos por vencidos. Y esto es tan sutil que inconcientemente podemos pasar al lado obscuro del camino sin siquiera
darnos cuenta.